Acuerdo de $600K por resbalón y caída en apartamento

Se obtuvo justicia para una residente del Bronx con problemas de salud preexistentes que resultó lesionada después de que sus informes escritos continuos sobre una condición peligrosa de agua en su apartamento fueran ignorados por su arrendador, la administración y el superintendente. Cuando un resbalón y caída resultó en una lesión de espalda aún mayor, la víctima recurrió a los abogados experimentados en resbalones y caídas Raphaelson & Levine en busca de ayuda.

Nuestra cliente, una inquilina del primer piso ubicada directamente encima del techo plano del garaje del edificio en un gran edificio de gran altura en el Bronx, frecuentemente encontraba agua filtrándose en su apartamento desde el techo plano del garaje. El mal estado del drenaje de agua se reportó continuamente al arrendador, la oficina de administración y el superintendente. Desafortunadamente, sus quejas no fueron atendidas y la condición persistió.

De camino al baño, la residente resbaló y cayó sobre un charco que se había acumulado por el agua que se filtraba a través de la pared, causándole una grave lesión de espalda. Cabe destacar que la víctima tenía una lesión de espalda previa debido a una caída anterior y de hecho había sido declarada discapacitada. Esta caída empeoró drásticamente su condición de espalda y fue, literalmente, la gota que colmó el vaso, o la caída, que le rompió la espalda.

Días antes del juicio en el Tribunal Supremo del Bronx, el asunto procedió a mediación ante el Honorable DiBalsi en National Arbitration and Mediation en Manhattan, NY. Después de una exhaustiva mediación de dos días, la firma prevaleció, con los socios Andrew Levine y Howard Raphaelson negociando un acuerdo por resbalón y caída de $600,000.

‍Este Caso Se Ganó Por Varios Puntos Clave:

‍‍1. Nuestra firma trabajó diligentemente con los médicos de nuestra cliente para establecer la causa de la lesión, trabajando con radiólogos, cirujanos de columna y el quiropráctico que trató a nuestra cliente por su caída anterior y la caída actual. Esto nos permitió demostrar claramente que la lesión se exacerbó o empeoró y así permitió una recuperación exitosa. Cuando se aborda y maneja adecuadamente, una lesión previa no tiene por qué ser un impedimento para un reclamo, sino que puede ser una prueba sólida para establecer la parte nueva o empeorada de la lesión.

2. Nuestra cliente había presentado quejas previas por ESCRITO. Si bien la palabra de uno puede ser suficiente, a menudo está sujeta a un extenso contrainterrogatorio y se encuentra con una versión opuesta. Aquí nuestra cliente presentó sus quejas por mensaje de texto, que incluso incluían fotografías. Estos mensajes de texto resultaron ser una prueba poderosa cuando los demandados argumentaron que no estaban al tanto de la condición antes de su lesión, un componente necesario para probar su caso.

Recomendamos encarecidamente que, si se enfrenta a una condición peligrosa, la reporte de inmediato y la documente de una manera que pueda ser guardada. Una queja por escrito, ya sea carta, mensaje de texto o correo electrónico, a menudo estimulará una respuesta adecuada del arrendador y también servirá como prueba definitiva de que la queja fue presentada en el desafortunado caso de que ocurra un incidente o lesión más tarde. Si presenta una queja en persona o por teléfono, se recomienda encarecidamente un mensaje de texto, correo electrónico o carta de confirmación de seguimiento.